domingo, 1 de enero de 2012

El derecho a la Felicidad



El propósito fundamental de nuestra vida es buscar la felicidad. Todos buscamos algo mejor en la vida. Se puede alcanzar la felicidad mediante el entrenamiento de la mente.

Por mente no se entiende sólo la capacidad cognitiva o el intelecto. La palabra tibetana para mente, Sem, se acerca más a psique, ‘espíritu’, e incluye intelecto y emociones, corazón y cerebro.

Al imponer una cierta disciplina interna, podemos experimentar una transformación de nuestra actitud, de nuestra perspectiva y enfoque en la vida.

Uno empieza por identificar aquellos factores que conducen a la felicidad, y los que llevan al sufrimiento. Luego es necesario eliminar gradualmente los factores que llevan al sufrimiento mediante el cultivo de de los que llevan a la felicidad. Ese es el camino. Más que poner esfuerzo en quitarse los negativos, cultivar los positivos.

La búsqueda y el alcance de la felicidad personal no conducen al egoísmo y al ensimismamiento, se ha demostrado que al contrario produce beneficios para la familia y el conjunto de la sociedad.

         De ‘El Arte de la Felicidad’ por SS el Dalai Lama