El
Dalai Lama, líder espiritual del budismo tibetano, al centro, con el obispo de Londres,
Richard Chartres, a la derecha, y
el Pastor Canónico Reverendo Michael
Colclough de la Catedral de Saint Paul, saliendo de
la catedral en Londres, después de recibir el Premio Templeton 2012 que le fuera otorgado para fomentar la investigación científica y
la armonía entre las religiones. Foto del Christian Science Monitor, 14 de Mayo 2012
LONDRES, Lunes 14 de mayo – Su Santidad el Dalai Lama fue
recibido en la Catedral de St.Paul por el Rmo. Michael Colcough. Mientras
subían las viejas escaleras juntos y a través de las columnas de la sacristía,
Su Santidad dijo que le recordaba las escaleras y corredores del Palacio
Potala; en efecto, ambos edificios datan del siglo 17. Durante una breve
reunión en la sacristía con el Dr.John Templeton y su esposa e hija, el Dr.
Templeton le dijo a Su Santidad el Dalai Lama, que su padre, John Templeton,
quien fundara el Premio y hubiese cumplido 100 años este año, hubiese estado
muy complacido por el premio de este año.
Su Santidad recordó a su propio padre, de quien dijo tenía mal carácter y a su madre
de quien recibió sus primeras lecciones de bondad y generosidad. También habló sobre
cómo la fuente de calma mental está dentro de nosotros mismos, mientras que la
educación nos prepara para tomar una visión más realista y amplia de nuestra
situación.
El Dr.Templeton que da gran valor a la gratitud, le preguntó cómo podemos ejercitar el
desarrollo de la gratitud y la compasión. Su Santidad sugirió que cuando las
personas comienzan a apreciar que el cultivar tales valores internos tiene un
efecto positivo sobre nuestra salud física y bienestar, mientras que la ira es
mala para nuestra salud, las personas
están mucho más dispuestas a tratar de desarrollarlos.
Luego, Jonathan Dimbleby abrió la conferencia de prensa,
presentando al Dr.John Templeton, presidente de la Fundación Templeton, quien
habló del deseo de su padre de recompensar a los “empresarios del espíritu”.
Explicó que los jueces habían elegido a Su Santidad por su
firme adhesión a los valores espirituales y su convicción de que la compasión y
la bondad tienen el poder de mejorar el
mundo.
Su Santidad a su vez, habló de su compromiso de compartir
con otros su experiencia de que la genuina paz interior viene desde dentro, así
como de su compromiso de fomentar la armonía y el respeto entre todas las
creencias. Mencionó otra vez su sensación de que los jueces lo habían premiado
en reconocimiento a su pequeño servicio a la humanidad.
Dan Goleman, autor del best-seller, La Inteligencia
Emocional, y miembro fundador del instituto Mind
& Life, elogió la convicción de Su Santidad de que tanto la ciencia
como la espiritualidad pueden contribuir a aliviar el sufrimiento y fomentar la
compasión.
Richie Davison, otro veterano del Mind & Life, elogió a su vez al Dalai Lama por indicar con
persistencia que la compasión y la bondad son parte del repertorio emocional de
todos, una idea que ha tenido un profundo impacto en la ciencia moderna. En
2003, en una conferencia del Mind &
Life, Su Santidad señaló que el budismo tiene muchos métodos para tratar
las emociones destructivas. Él sugirió que los científicos exploran sus
aplicaciones bajo condiciones de laboratorio y si ellos prueban que es útil, lo
hacen disponible para los otros.
En el Oculus, una
histórica sala bajo la Catedral, Su Santidad se reunió con el Primer Ministro
David Cameron y el Vice-Primer Ministro, Nick Clegg. Ambos líderes expresaron
preocupación por la situación en Tíbet e interés en otros sucesos en China. Su
Santidad les aconsejó adherirse a sus principios sin ser desviados por
consideraciones económicas de corto alcance. Poco después, Su Santidad se
encontró con el Arzobispo Rowan Williams, quien recientemente ha anunciado que se retirará a fines de este
año.
Luego Su Santidad fue llevado a las escaleras de entrada
de la Catedral de St.Paul donde la ceremonia de entrega había sido organizada.
Se le dio la bienvenida con bailarines tibetanos que bailaron una danza
auspiciosa (Tashi Sholpa) y fue
recibido por el Rmo.Obispo de Londres, y el Rmo.Michael Colclough, Pastor
Principal de la Catedral de St.Paul.
Ellos caminaron por la nave central en procesión mientras Su Santidad
saludaba a nuevos y viejos amigos a uno y otro lado.
El Dr.John Templeton Jr. repitió las palabras dichas a Su
Santidad sobre los deseos de su padre y agradeció a todos los miembros de la
Catedral de St.Paul por haber hecho posible que la ceremonia se llevase a cabo
allí.
Al aceptar el premio Templeton, Su Santidad dijo cuán
feliz se sentía de estar en el magnífico templo de St.Paul, repleto de caras
sonrientes. Él anotó que entre los varios cientos de personas allí, muchos
pertenecían a diferentes naciones y razas, pero que todos eran los mismos seres
humanos.
Por esa similitud, dijo no tenemos razones para pelear,
pero cuando lo olvidamos y nos centramos en cambio en diferencias secundarias,
tendemos a reñir unos con otros. Habló de la mente calma como fuente de la
felicidad verdadera y que la calma mental depende de la auto-confianza, porque
reduce el temor y la ansiedad. Habló de su trabajo para fomentar la armonía y
el respeto mutuo entre todas las tradiciones religiosas del mundo, su trabajo para
estimular la cooperación la lucha contra los problemas medioambientales y su
trabajo para promover el uso de la no-violencia como medio para resolver los
problemas y conflictos.
Se refirió a que el siglo XX fue un período de un gran
desarrollo y logros, pero también un período de grandes derramamientos de
sangre. Expresó su esperanza de que el siglo XXI pueda convertirse en cambio,
en un período de paz y diálogo. Dijo que consideraba el otorgamiento del Premio
Templeton como un reconocimiento a la pequeña contribución que él ha hecho en
estos campos, a la humanidad.