jueves, 26 de marzo de 2015

LA IRA U OFENSA, UN REGALO QUE NO DEBES TOMAR


Un día el Buda estaba caminando por un pueblo. Un joven muy enojado y grosero se acercó y comenzó a insultarlo. "Tú no tienes derecho a enseñar a otros", gritó. "Eres tan estúpido como todos los demás. No eres más que una falsificación". 
El Buda no estaba molesto por estos insultos. En su lugar, le preguntó al joven
"Dime, si compras un regalo para alguien, y esa persona no lo toma, a quien le pertenece el regalo? "
El hombre se sorprendió ante una pregunta tan extraña y respondió, "Me pertenecería, porque yo compré el regalo".
El Buda sonrió y dijo: "Eso es correcto. Y es exactamente lo mismo con tu ira. Si te enojas conmigo y no tomo la ofensa ni me considero ofendido, entonces la ira recaerá sobre ti. Entonces eres el único que se produce un sufrimiento a sí mismo, no soy yo el que lo hace. Todo lo que has hecho es herirte a ti mismo".
Si tienes razón, entonces no hay necesidad de enojarse.
Y si te equivocas entonces no tienes ningún derecho a enojarte.